Reproducir lavanda por esqueje

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¿Quieres llenar tu jardín de lavanda sin gastar mucho? La lavanda es una planta aromática preciosa y resistente, y la mejor forma de multiplicarla es a través de esquejes. Aquí te comparto tres métodos infalibles para que logres enraizarla con éxito.

1. Esquejes en agua

Este método es ideal para principiantes, ya que te permite observar el desarrollo de las raíces.

Corta un esqueje de unos 10-12 cm de una rama joven y sana.
Retira las hojas de la parte inferior, dejando solo las superiores.
Coloca el esqueje en un frasco con agua, asegurándote de que el nodo quede sumergido.
Cambia el agua cada 3-4 días y colócalo en un lugar con luz indirecta brillante.

Tiempo para enraizar: 2-3 semanas

Consejo: una vez que las raíces midan al menos 2 cm, trasplanta a una maceta con sustrato bien drenado.

2. Esquejes en sustrato

Este es el método más efectivo para obtener plantas fuertes y resistentes.

Prepara una mezcla de sustrato ligero (tierra para macetas con arena o perlita).
Corta el esqueje igual que en el método anterior.
Sumerge la base del esqueje en hormonas de enraizamiento (opcional, pero recomendable).
Planta el esqueje en el sustrato, presionando ligeramente la tierra.
Mantén la tierra ligeramente húmeda y coloca el esqueje en un lugar con luz indirecta.

Tiempo para enraizar: 4-6 semanas

Consejo: cubre el esqueje con una bolsa de plástico perforada para mantener la humedad, especialmente en climas secos.

3. Esquejes en ambiente húmedo (Mini invernadero casero)

Perfecto si quieres aumentar las probabilidades de éxito en condiciones controladas.

Corta varios esquejes y plántalos en pequeñas macetas individuales con sustrato ligero.
Coloca las macetas dentro de un recipiente transparente o una caja plástica para crear un mini invernadero.
Ventila el invernadero a diario para evitar la acumulación de hongos.

Tiempo para enraizar: 3-5 semanas

Consejo: no dejes que las hojas toquen las paredes del invernadero para evitar que se pudran.

Consejos extras:

La lavanda prefiere suelo seco y bien drenado, así que evita el exceso de riego.
No uses esquejes en flor, ya que las flores consumen demasiada energía.
No te desesperes si no enraízan todos los esquejes. A veces, solo necesitas intentarlo de nuevo.

Ahora que conoces estos tres métodos, ¡es momento de reproducir lavanda y llenar tu hogar de su fragancia relajante!