
Asegura un cambio de temporada productivo y sin estrés para tus plantas.
Ya se ha dado inicio a un clima más fresco, ideal para planificar la siguiente etapa del huerto. Esta transición es clave: lo que hagas ahora determinará la salud y productividad de tus cultivos en los próximos meses.
Con unos ajustes en riego, nutrición y selección de cultivos, podrás mantener el huerto activo y listo para el otoño sin que tus plantas sufran el cambio.
1. Evalúa el estado de tus cultivos actuales
- Retira plantas enfermas o agotadas para evitar plagas y liberar espacio.
- Cosecha lo que esté listo antes de que bajen las temperaturas.
2. Mejora el suelo
- Añade compost o humus de lombriz para reponer nutrientes.
- Incorpora acolchado para conservar la humedad y proteger de cambios bruscos de temperatura.
3. Siembra cultivos de otoño
- Ejemplos: espinaca, lechuga, acelga, rabanitos, brócoli, coliflor.
- Aprovecha que el suelo aún conserva calor del verano para una germinación más rápida.
4. Ajusta el riego
- Reduce la frecuencia si las lluvias aumentan.
- Mantén la humedad constante para evitar estrés hídrico.
5. Protege contra el viento y el frío temprano
- Coloca barreras naturales o mallas para reducir el impacto del viento.
- Ten listas mantas térmicas para heladas inesperadas.
Tip Lenteja
Si tienes plantas perennes, aprovecha para podar suavemente y retirar hojas secas: así estarán más fuertes para la nueva temporada.
Preparar tu huerto para el otoño es una inversión en tiempo y salud vegetal. Con estas acciones, no solo prolongas la vida de tus cultivos, sino que también aseguras una cosecha constante y un espacio verde vibrante en los meses que vienen.
Recuerda que dependiendo de donde nos leas el clima será diferente, procura realizar estas actividades en la transición del verano al otoño, o si consideras que el clima aún no cambia lo suficiente, siempre podrás dejar estas actividades para la etapa que consideres más ideal.


